El hígado graso es una condición en la cual se acumula grasa en las células del hígado. Esta aglomeración puede ser causada por factores tales como el consumo excesivo de alcohol, la obesidad, la diabetes y una dieta rica en grasas saturadas.
Es importante mencionar que, por lo general, las personas que padecen de hígado graso buscan soluciones y alternativas alimentarias que les permita mejorar su salud. Por eso, en este artículo, se explica qué dieta es adecuada para atravesar esta enfermedad, siendo los beneficios del yogurt protagonistas esenciales de esta alimentación.
¿El Yogurt Puede ser Beneficioso para el Hígado Graso?
El yogurt es un alimento lácteo fermentado que se obtiene a partir de la fermentación de bacterias beneficiosas. Es una fuente de proteínas, calcio y vitaminas del grupo B.
Gracias a su composición, el yogurt tiene la capacidad de proteger el hígado; por eso, se recomienda consumirlo diariamente a fines de aprovechar sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. De hecho, el consumo de bacterias del ácido láctico y de calcio son esenciales en la conformación de un sistema inmunitario eficaz.
Específicamente en casos de hígado graso, consumir yogures frecuentemente, ayuda a que los riñones eliminen las toxinas que el hígado ha procesado.
Yogures Probióticos ¿Qué Son y Cómo Cuidan la Flora Intestinal?
Hoy en día, el mercado cuenta con una gran variedad de yogures. Uno de ellos, es el yogurt probiótico que contiene cepas de bacterias beneficiosas que pueden mejorar la salud del hígado.
¿Cómo es esto posible? Los probióticos ayudan a equilibrar la microbiota intestinal y reducen la inflamación, lo cual puede ser beneficioso para aquellos que sufren de hígado graso. De hecho, una microbiota intestinal saludable está relacionada a un mejor metabolismo de las grasas y una reducción en la acumulación de grasa en el hígado. Por esta razón, se aconseja ingerir este tipo de yogurt para mejorar la patología.
¿Y el Yogurt Bajo en Grasas?
El yogurt bajo en grasas es otro producto recomendado. Su composición contiene leche descremada, por lo que su aporte calórico el altamente menor que el yogurt entero. Puede comerse junto con frutas, verduras, granos integrales y proteínas magras lo cual beneficia al organismo y, por ende, el hígado graso.
En definitiva, el yogurt bajo en grasa es una opción nutritiva y rica para incluir en la dieta.
Complementar el yogurt con otros alimentos
Sin lugar a dudas, consumir yogurt ayuda a equilibrar la microbiota intestinal, reduce la inflamación y, se obtiene por consecuencia, beneficios indirectos para la salud hepática cuando se lo incluye en una dieta equilibrada y variada.
Además de este alimento, las personas que tengan hígado graso deben contemplar la ingesta de grasas saludables, tales como los ácidos grasos omega-3 y omega-6. ¿Qué alimentos contienen ácidos grasos? Se pueden encontrar en el pescado, las nueces y las semillas que, combinado con el consumo de yogurt, aporta una fuente de minerales, vitaminas y proteínas de alta calidad para el organismo.
En cualquier caso, es muy importante tener en cuenta que siempre se recomienda realizar una consultar a un profesional de la salud antes de realizar cambios significativos en la alimentación.