11. ¿Solucionará la microbiota intestinal todos nuestros problemas de salud?
La microbiota intestinal, gracias a su estrecha relación con el metabolismo y el sistema inmunitario, constituye uno de los centros neurálgicos de nuestra salud, una posición que la coloca en el medio de los procesos que influyen en el riesgo de contraer enfermedades (Cani, 2017).
Las enfermedades como la obesidad, diabetes, enfermedades cardiovasculares o cáncer, todas ellas responsables de gran parte de las muertes en el mundo, están vinculadas a cambios observables en la microbiota intestinal humana. Por otra parte, numerosas enfermedades crónicas —enfermedades inflamatorias crónicas del intestino, asma y alergias, artritis rumatoidea o encefalomielitis miálgica (síndrome de fatiga crónica) — también han sido asociadas a una disbiosis de la microbiota intestinal.
Estas misteriosas conexiones intrigan no solo a los científicos, sino también al público en general. La microbiota intestinal, gracias a su estrecha relación con el metabolismo y el sistema inmunitario, podría constituir el centro neurálgico de nuestra salud. En otras palabras, se encontraría en la «intersección» de los procesos que influyen en el riesgo de contraer ciertas enfermedades. Varias investigaciones se centran en la forma en que la microbiota intestinal afecta al metabolismo y la inmunidad, por su impacto en ciertos parámetros de salud, en especial en la obesidad y la diabetes tipo 2.
La manipulación de la microbiota intestinal tiene sin duda un enorme potencial en el ámbito de la mejora de la salud. Pero ahora mismo, la pregunta esencial que debemos plantearnos es: ¿acabará la microbiota intestinal por ser la solución a todos nuestros problemas de salud?